miércoles, 30 de abril de 2014

David y Jonathan: Amor homosexual en la Biblia

Detalle de David y Jonathan en el Vitral de la Iglesia
de San Marcos Portobello. 1882. Edimburgo. Escocia.
El amor entre varones se celebra en la Biblia Hebrea con la historia de David y Jonathan.
Ambos se conocieron cuando David era un pastor muy joven. Jonathan era un guerrero valiente que había regresado victorioso de la batalla. Jonathan era el hijo mayor de Saúl, el primer rey de Israel. David fue llevado directamente a ver al rey Saúl después de haber decapitado al gigante filisteo Goliat. Los estudiosos estiman que David tenía unos 18 años de edad y que Jonathan tenía por lo menos 10 años más que David.
Jonathan se enamoró a primera vista del héroe joven y apuesto. Como dice la Biblia Hebrea: "El alma de Jonathan quedó ligada al alma de David" (1 Samuel 18.1). Su historia abarca más capítulos en la Biblia Hebrea que cualquier otra historia de amor humano.
David, luego el segundo rey de Israel, fue un guerrero aclamado, músico y poeta. Se le atribuye la composición de muchos de los salmos en la Biblia. Las genealogías en los evangelios cristianos nombran a David como uno de los antepasados de Jesús.
La idea moderna de orientación sexual no existía en los tiempos bíblicos pero la historia de amor de Jonathan y David en 1 y 2 Samuel sugiere que las parejas del mismo sexo son afirmadas y bendecidas por Dios.
Poco después de que David conociera a Jonathan, ambos manifestaron su compromiso de hacer un pacto entre sí. Ese momento dramático e intenso se describe en 1 Samuel 18.3–4: "Entonces Jonatán hizo un pacto con David, porque lo amaba como a sí mismo. Jonatán se quitó el manto que llevaba puesto y se lo dio a David, y sus armas, incluso su espada, su arco y su cinturón".
La Biblia Hebrea narra los altibajos de la relación de David y Jonathan a lo largo de sus próximos 15 años, incluyendo sus lágrimas y sus besos. El rey Saúl tiene celos de la popularidad de David y sigue tratando de matarlo, mientras que su hijo Jonathan rescata a su amigo de varias maneras.
Aalgunos artistas se centran en un momento dramático que vino después, cuando Jonathan se encontró con David, quien estaba escondido detrás de una pila de piedras, para advertirle que Saúl quería matarlo.
Luego se besaron y lloraron juntos hasta que David se desahogó. Por último, Jonathan le dijo a David: —Vete tranquilo, pues el juramento que hemos hecho los dos ha sido en el nombre del Señor, y hemos pedido que para siempre esté él entre nosotros dos y en las relaciones entre tus descendientes y los míos.
David y Jonathan se unieron tan profundamente que parecía que algún día gobernarían Israel juntos. Pero ese día nunca llegó porque Jonathan murió en una batalla. David lloró profundamente su muerte con su famoso lamento según se narra en 2 Samuel 1.26:

Por ti lleno de angustia,
Jonatán, hermano mío,
en extremo querido, más delicioso para mí tu amor
que el amor de las mujeres.

Estudiosos de la Biblia con una visión positiva de la experiencia gay han escrito mucho sobre la relación entre David y Jonathan. El libro clásico sobre el tema es "Jonathan amó a David: La homosexualidad en los tiempos bíblicos" de Thomas Horner.
El amor entre ambos varones se celebra también en la literatura, incluyendo el poema "El encuentro de David y Jonathan" del poeta inglés John Addington Symonds en el siglo XIX. Este poeta es conocido como un temprano defensor del amor masculino (homosexual) y escribió muchos poemas inspirados en sus propias aventuras homosexuales.
Es imposible saber si David y Jonathan expresaron su amor sexual. Algunos consideran que David era bisexual, ya que la Biblia Hebrea también relata cómo cometió adulterio con Betsabé, a quien luego convirtió en una de sus ocho esposas. 

sábado, 26 de abril de 2014

Madrid Titanes: el primer equipo gay inclusivo de rugby en España

 En los 70, un equipo de instituto de Virginia, los Titans, logró algo impensable en una zona y una época marcada por la lucha racial: que blancos y negros jugaran en el mismo equipo de fútbol americano. Como homenaje, los Madrid Titanes han escogido ese nombre para romper un tabú y declararse, abiertamente, el primer equipo gay inclusivo de rugby en España y primero en ser miembro de la IGRAB (Asociación Gay Internacional de Rugby)
"Nuestra causa es luchar contra la homofobia en el deporte, no solo en el rugby", comenta Víctor Granado, presidente y capitán, quien inició esta idea hace una año en el parque del Retiro "porque quería jugar los domingos al rugby con cinco amigos". "Queremos darle normalidad a un aspecto que es corriente en la vida diaria y hacer explícito que cualquiera puede venir a jugar con nosotros. A nadie le preguntamos su orientación sexual cuando viene a jugar con nosotros, pero la balanza está desequilibrada a su favor en un 90%", reconoce Víctor
Javier Corral, apertura de los Titanes, destaca la importancia del proyecto: "El hecho de que el club se creara hace un año y que ya seamos más de 50 jugadores quiere decir mucho sobre la necesidad de que existiera un club así. Hay gente que por prejuicios propios o ajenos no se atrevía hasta ahora a dar el salto". 
"En el equipo lo vivimos de una forma normal. Nuestros valores son inclusividad, respeto y disciplina", recalca Teresa West, la única chica del equipo y de origen argentino. Italianos, venezolanos y un escocés visten también la camiseta negra y azul a rayas horizontales del club. 
Hasta ahora, los Madrid Titanes han disputado amistosos y la acogida de los rivales no ha podido ser mejor. "Ha sido estupenda. Hemos pasado estupendos terceros tiempos con nuestros rivales después de los partidos", afirma Granado. "El rugby representa muy bien los valores de la inclusión. A nosotros, otros clubes nos han invitado a torneos y nos han ofrecido su ayuda para cualquier cosa desinteresadamente", añade Corral
"Todavía existe mucho tabú sobre la homosexualidad y esperamos que con los Titanes ayudemos a romperlo. El deporte debe ser para todos", concluye Teresa. 
En septiembre se federerán y comenzarán a jugar en las categorías regionales de la Comunidad de Madrid.

viernes, 25 de abril de 2014

Seth y Horus: la homosexualidad en el Antiguo Egipto

Seth y Horus protegiendo al faraón.
Relieve en Abu Simbel.
Los textos sobre la homo-sexualidad en el Antiguo Egipto no son muy numerosos. Son polémicos y están abiertos a diferentes interpretaciones. La sexualidad casi nunca es repre-sentada y es rara su mención en los textos.
La referencia más explícita a la homosexualidad está en el mito de Seth y Horus. La leyenda cuenta como Seth, que había matado a su hermano Osiris, dominaba el alto Egipto, y luchaba con su sobrino Horus, hijo de Osiris, que dominaba el bajo Egipto, lo que perso-nifica la separación real de ambos territorios durante el periodo predinás-tico de Egipto. El relato cuenta que Seth trató de violar a Horus, y que lucharon en el Nilo transformados en hipopótamos durante días. En la lucha, Seth le sacó un ojo a Horus mientras que Horus arrancó el pene de Seth. Al final con la intervención de Tot, el dios de la sabiduría, ambos dioses se reconcilian.
Esta legendaria lucha sexual y su posterior reconciliación es interpretada por los historiadores como una alegoría de las luchas entre ambos reinos, que se unificarían alrededor del 3000 a. C. Tras la unificación la pareja de dioses se representaba frecuentemente como símbolo de la unidad con ciertas connotaciones ambiguas. En algunas versiones Seth incluso da a luz a un niño de Horus.
Otro relato encontrado en un papiro en El-Lahun (Imperio Medio, hacia 1700 a. C.), cuyo texto completo se ha conservado en una copia del Imperio Nuevo (hacia 1200 a. C.). Cuenta otra versión del mito de Horus y Seth. En él se describe como Seth viola a Horus e intenta humillarlo. Llama a los jueces para que dieran constancia del hecho, pero Horus, había recogido el semen de Seth por consejo de su madre Isis, que lo puso en una lechuga, la comida favorita de Seth, y éste se lo comió sin darse cuenta. Cuando los jueces llamaron al semen para constatar la fecundación, todos se sorprendieron al encontrarlo en el estómago de Seth, siendo este el deshonrado y exonerando a Horus.
La interpretación de este fragmento vuelve a ser problemático. No se conoce el motivo de la humillación de Horus si es por ser sometido a un acto homosexual, por ser una violación, o por los dos motivos. En cualquier caso aunque no nos revele la opinión de la sociedad egipcia hacia la homosexualidad, nos dice que conocían el concepto de sexo entre hombres.
La historia de Horus y Seth podría indicar que en el antiguo Egipto existía una imagen de la homosexualidad similar a la existente en muchas culturas orientales. Las relaciones homosexuales son aceptadas para el homosexual activo (asociado a lo masculino), mientras que el pasivo (asociado a lo femenino) es despreciado.

Los manicuros del faraón.

Manicuros en la mastaba de Saqqara,
2.600 años a. C.
Las imágenes más antiguas que muestran
las relaciones homosexuales en el
Antiguo Egipto.
En 1964 en la necrópolis de Saqqara un arqueólogo descubrió una tumba donde se representaban escenas de la vida cotidiana en pareja de manicuros (Niankhkhnum y Khnumhotep) incluso abrazándose afectuosamente. Habían estado empleados en el palacio de Rey Nyuserra (quinta dinastía) alrededor del 2.600 a. C. Las imágenes de los dos hombres en la tumba eran muy similares a las de matrimonios heterosexuales encontrados en otras tumbas del mismo período.
Los dos manicuros aparecen siempre abrazados en actitud cariñosa, lo que se identificó con dos hermanos. Sin embargo, algunos historiadores han teorizado sobre la identidad homosexual de ambos personajes, basándose en otras coincidencias, como la conexión de sus nombres, Nianj-Jnum y Jnum-Hotep, y el hecho de que a los dos se les considerara “unidos en la vida y en la muerte”, igual que a las parejas desiguales de hombre y mujer:
Nianjjnum significa "unido a la vida" y Jnumhotep "unido al estado bendito de la muerte". Ambos juntos pueden traducirse como "unidos en la vida y en la muerte".
Este descubrimiento, el más antiguo de cuantos se refieren a la existencia de la homosexualidad en el antiguo Egipto, supuso la confirmación de cómo también allí determinados oficios relacionados con la estética (manicuro, maquillador, peluquero…) eran ejercidos frecuentemente por varones homosexuales y que además estos vivían en pareja abiertamente y eran enterrados juntos para compartir la eternidad.

jueves, 24 de abril de 2014

Poema de Gilgamesh

Gilgamesh y Enkidu.
Una historia homoerótica de los antiguos sumerios.
Gilgamesh, rey de Uruk (llamado Ereck en Génesis 10:10), era un hombre muy bello que debido a que es dos tercios dios y un tercio humano, afligía a los ciu-dadanos de Uruk, con su insaciable apetito sexual sin distinción de sexo, copulaba tanto con mujeres y hombres. Así que los dioses crean a un héroe capaz de acabar con él, llamado Enkidu, un hombre igualmente hermoso, fuerte y con los cabellos largos, que es entrenado por una prostituta mandada también por los Dioses. Cuando Gilgamesh y Enkidu finalmente se encuentran, en un primer momento combaten con furor, pero luego se besan y conforman una  inseparable amistad. Después de unas de sus tantas aventuras juntos, Gilgamesh es observado por la diosa Ishtar, que queda prendada por la belleza del rey,  y le pide que fuera su hombre. Cuando él se niega, enfurecida, ella convence a los dioses para liberar el toro del cielo para matar a Gilgamesh. Sin embargo, Enkidu agarra el animal por la cola, mientras Gilgamesh empuja su cuchillo y mata a la gran bestia. Pero los dioses furiosos porque el gran toro ha sido asesinado, deciden que uno de los héroes debe morir, eligiendo a Enkidu. Y así, Enkidu se debilita y muere. Gilgamesh, fuera de sí por el dolor, cubre el rostro de su amigo "como una novia", arranca el pelo rizado en grupos, se arranca la ropa fina, y llora sin consuelo por la pérdida de su amigo. A partir de entonces, se pone en marcha para encontrar un camino a la vida inmortal, para poder reunirse con Enkidu.

Aunque muchos estudiosos han negado que exista un contenido homoerótico aquí, la intensidad y la exclusividad de su amistad, junto con el énfasis en su belleza, hace que este punto de vista sea difícil de mantener. 

La homosexualidad en la antigua Mesopotamia

Placa de la Antigua Babilonia (1.800 a. C.)
expuesta en el Museo Británico.
En el territorio de Mesopo-tamia, en Oriente Medio, surgieron las primeras civilizaciones de la Historia. Allí la práctica homosexual era aceptada en unas y castigada por otras.

Hace más de 5000 años, la primera civilización comenzaba a surgir en el lugar conocido históricamente como Mesopotamia (literalmente "entre dos ríos"), pues este territorio estaba entre los ríos Tigris y Éufrates. Actualmente corresponde a Iraq y parte de Siria. Esta primera civilización es conocida como Sumeria, 2500 años más antigua que la cultura griega.

Los historiadores y arqueólogos han descubierto que en Sumer ya existían relaciones homosexuales, tanto con jóvenes como entre hombres adultos. En algunos de los escritos más antiguos de la humanidad se habla de unos sacerdotes llamados assinu, literalmente "hombre útero", que sería el término con el que se referirían a los homosexuales masculinos. Seguramente, estos hombres poseerían una buena posición social.

En el relato épico del héroe Gilgamesh, personaje legendario de la cultura sumeria y posteriores, aparece una relación gay con uno de sus mejores compañeros, Enkidu.

En una de las posteriores civilizaciones dominantes de Mesopotamia, los Babilonios, aparece muchas más constancias históricas acerca de la existencia de la homosexualidad. De hecho, la experta Karen Rhea Nemet-Nejat en su libro "Daily Life in Ancient Mesopotamia" considera que las relaciones homosexuales eran algo habitual y no condenado.

La estrecha relación entre la religión mesopotámica y algunas prácticas sexuales, e incluso la prostitución religiosa, hacían que, evidentemente, la homosexualidad no estuviera mal vista. En los presagios sumerios de Shumma Alu se habla de los assinu y la prostitución masculina del siguiente modo: "si un hombre mantiene relaciones sexuales con un assinnu, quedará libre de desgracias".
Sin embargo, en la vecina civilización Asiria, la homosexualidad no estaba tolerada, al menos la masculina. De hecho, en el Código de Hammurabi (Museo del Louvre, París), es un código jurídico que data aproximadamente del 1760 a.C. donde aparecen leyes en contra de la homosexualidad.

En otros textos se han encontrado referencias más directas a los castigos que suponía ser gay en Asiria. El mejor ejemplo es éste que aparece en el libro anteriormente mencionado de Karen Rhea Nemet-Nejat: "Si un hombre ha yacido con su amigo y se prueban los cargos y se le encuentra culpable será castigado convirtiéndole en eunuco".

El primer homosexual de la historia.

Restos del que podría ser uno de los primeros
homosexuales de la prehistoria.
La homosexualidad ha estado presente en las sociedades desde tiempos muy antiguos... ¿pero exacta-mente desde cuándo? En abril de 2011 salieron durante unas excavaciones realizadas en un suburbio a las afueras de Praga (República Checa) los restos del que podría ser uno de los primeros homo-sexuales de la prehistoria.

La forma en que se encontraba enterrado y los ornamentos que lo acompañaban parecen indicar que se trataba de un hombre que, ya por entonces, era considerado mujer o transexual.

En aquella época a los hombres se les enterraba sobre su costado derecho y mirando al oeste acompañados de utensilios de guerra como lanzas, cuchillos o cualquier otra arma o herramienta de la época y algunas porciones de alimento y bebida  para el trayecto, mientras que las mujeres eran enterradas sobre su lado izquierdo y con la cabeza mirando hacia el este. Éstas estaban acompañadas de collares hechos con dientes de animales, pendientes de cobre, jarras y/o utensilios de menaje, así como un recipiente en forma de huevo que era colocado cerca de los pies.

Los restos encontrados por el equipo de la arqueóloga Kamila Remisova Vesinova y que datan aproximadamente de hace unos 5.000 años, pertenecen a un hombre pero éste estaba colocado sobre su lado izquierdo, mirando hacia el este y acompañado de menaje en lugar de armas.

miércoles, 23 de abril de 2014

La libertad sexual en la prehistoria.

La placa de Gönnersdorf conocida como
"Las bailarinas", grabada hace 12.000 
años, muestra dos mujeres en actitud 
cariñosa.
Tras más de un siglo de mojigatería, una exposición en la cuna de la paleoantropología española, los yacimientos de Atapuerca, saca del armario los indicios que sugieren que el sexo homosexual era habitual en el Paleolítico. Las pruebas parecen consistentes. Un grabado en una placa de piedra de la cueva francesa de La Marche muestra lo que parece una mujer dedicada a hacerle un cunnilingus a otra. En otra piedra caliza del abrigo rupestre de Laussel, en Dordoña, alguien talló hace unos 27.000 años a dos mujeres con las piernas entrelazadas, en la postura conocida como la tijera. Y en Gönnersdorf, un yacimiento alemán en la orilla del Rin, decenas de placas muestran parejas de mujeres. Una de ellas, de 12.000 años y bautizada las bailarinas, muestra dos hembras frotando sus pechos en actitud cariñosa. Y también hay un coito anal entre dos hombres en La Marche.


Sin embargo, el estudio de la prehistoria está sometido a un dogma desde el siglo XIX: la sexualidad de los mal llamados hombres y mujeres de las cavernas sólo estaba orientada a la reproducción. El lesbianismo y la homosexualidad masculina son tabú. El estudio de la prehistoria ha sido, en cierto modo, homófobo. "Apenas hay estudios y en los congresos no se habla de la sexualidad en el Paleolítico. Pero los primeros Homo sapiens que llegaron a Europa eran anatómica y cerebralmente iguales a nosotros, les gustaba lo mismo", explica Marcos García Díez, coordinador de las cuevas prehistóricas de Cantabria para el Gobierno autonómico y uno de los comisarios de la exposición.

La muestra, llamada Sexo en piedra, airea el kamasutra paleolítico: sexo con animales, tríos, consoladores, voyeurismo, masturbación, sexo oral. Y, por fin de manera abierta, relaciones homosexuales. "Podríamos hablar de una homofobia hasta ahora, pero no me atrevo a entrar ahí", admite García Díez. "Si lo vinculamos a la etnografía, y miramos los grupos primitivos actuales, la homosexualidad existe, por supuesto. Y en el Paleolítico también existía, pero no se ha estudiado por una cuestión de mentalidad, porque llevamos siglos con la idea de la familia en la cabeza. Yo creo que dentro de 10 o 15 años se hablará de ello con naturalidad", vaticina el prehistoriador.

El padrino de la muestra es uno de los codirectores de los yacimientos burgaleses, Eudald Carbonell. "Me sorprende el silencio que rodea a la homosexualidad en el Paleolítico. Imagino que hay que atribuirlo a la cultura dominante, que es la judeocristiana", opina.

Eudald Carbonell,  paleoantropólogo y codirector de los yacimientos de Atapuerca ha publicado El sexo social (editorial Now Books), un libro en el que analiza el papel del sexo en la evolución del ser humano. "En los mamíferos y, en concreto, en los primates, se da la homosexualidad. Y nosotros hemos heredado toda la variabilidad del comportamiento sexual del género Homo", expone Carbonell, director del Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social. "No conozco ningún equipo científico en el mundo que trabaje de manera específica en la sexualidad en el Paleolítico. Y es muy extraño, porque el sexo es fundamental en el comportamiento del Homo sapiens", lamenta.

Los dos comisarios de la exposición, García Díez y el urólogo Javier Angulo, del hospital Universitario de Getafe, escribieron un libro en 2005 con el mismo título que la muestra, Sexo en piedra. En sus páginas destacaba un bastón tallado hace 13.000 años en un asta de reno en la cueva francesa de Gorge d'Enfer. Posee una curiosa coronación: dos penes. Y hay muchas más piezas con morfología fálica en otros yacimientos franceses y cantábricos. Su función es un enigma. "Son todo hipótesis", explica Angulo. En un artículo publicado en 2006 en la revista Actas urológicas españolas, ambos autores comentaban que "de ningún modo todos los bastones de mando pueden ser interpretados exclusivamente como soportes para la masturbación femenina o para la práctica de sexo anal pero, por el contrario, se debe aceptar que la forma de alguno de ellos permitiría su uso en este tipo de prácticas sexuales".

Doble falo de Gorge d'Enfer
El doble falo de Gorge d'Enfer mide 9,5 centímetros de ancho y 11,5 de alto, si se observa como si fuera una L. Si se confirmara que se utilizó como juguete sexual para dos mujeres, sería otra patada a la interpretación clásica y rancia de la sexualidad en el Paleolítico. Sin embargo, es imposible demostrarlo.
"Hablar de un doble dildo quizá sea rizar el rizo, aunque en el Museo Nacional de Prehistoria de Francia, en Dordoña, hay una colección de falos de entre 20 y 30 centímetros que sólo pudieron emplearse como decoración o como consolador", interpreta Angulo.

Este médico especializado en prehistoria subraya que los arqueólogos son "demasiado descriptivos a veces". Y pone un ejemplo muy ilustrativo: "Dicen que en un dibujo aparece un pene con una mano al lado y que salen rayas del glande. Y no interpretan nada más. Pues yo ahí veo una masturbación".

martes, 22 de abril de 2014

¿Existía la homosexualidad en la prehistoria?

Petroglifos de Kangjiashimenji
Actualmente se discute alrededor del mundo si las personas del mismo sexo tienen derecho a amarse y unirse. Grupos opositores dicen que esto no es normal y constituye una alteración de la norma. La evidencia señala, sin embargo, que la conducta homosexual siempre ha existido. Se produce ahora una nueva evidencia de lo que se ha interpretado como conducta bisexual en unos petroglifos de 1000 años antes de Cristo.

Esquema de Petroglifos de Kangjiashimenji
Los petroglifos de Kangjiashimenji, presentan lo que pudiese ser considerado como la representación más antigua, y gráfica, del acto sexual. Los tallados en piedra se encuentran en la remota región de Xinjian en el noroeste de China. Pero lo más sorprendente es que en los mismos se observa lo que ha sido interpretado como actividad bisexual. Lo que sugiere que la misma parecía ser tan común que mereció ser representada en la obra.

Detralle Petroglifos
Los petroglifos fueron descubiertos por el arqueólogo Chino Wang Binghua, a finales de la década de los '80. En ellos se incluyen 100 figuras en lo que se interpreta como un rito de fertilidad. Aparecen lo que se interpreta son figuras femeninas y figuras masculinas. Casi todas las figuras masculinas tienen "penes erectos". Académicos que han estudiado la obra entienden que existe otro grupo de figuras que han sido identificadas como bisexuales, en estas se combinan elementos de las figuras femeninas y de las masculinas. Las figuras que han sido catalogadas como bisexuales tienen "penes erectos", pero llevan arreglos de cabeza que solo tienen las figuras femeninas, decoraciones en el pecho y en ocasiones una máscara. En una parte aparecen dos figuras, una masculina y otra identificada como bisexual, donde uno rodea con su brazo al otro, "ambos con penes erectos".

Los señalamientos sobre posible conducta bisexual son interpretaciones realizadas por los académicos, no existe evidencia clara e irrefutable que verifique estas alegaciones. Creemos, sin embargo, que dado que existe evidencia de conducta homosexual entre animales no nos debiese extrañar que nuestros antepasados hubiesen de igual manera practicado otras formas de amar.

lunes, 14 de abril de 2014

Homosexualidad darwiniana

Publicado en NeoFronteras en Junio 23, 2008 @ 12:46 am - Área: Genética

Explican la paradoja evolutiva que representa la homosexualidad masculina al tener en cuenta el factor de la fertilidad femenina.
Desde el punto vista evolutivo la homosexualidad debería de desaparecer. Por definición los homosexuales no se reproducen o se reproducen menos y sus “genes gays” que determinarían su sexualidad, serían eliminados del acerbo genético de la población en el transcurso de las generaciones. Pero los homosexuales están ahí, existen, y por tanto tenemos una situación paradójica.
Ahora un estudio afirma que en el caso de la homosexualidad masculina estos supuestos genes no son eliminados porque aumentan la fertilidad de las mujeres.
El estudio de gemelos idénticos sugiere que la homosexualidad masculina se ve influenciada por factores psicosociales, pero que tiene una importante componente genética. También hay ciertos estudios que muestran que los homosexuales varones tienen más parientes homosexuales por la línea materna que paterna. Esto no ha sido observado en la homosexualidad femenina, lo que indicaría, en este caso, un origen y dinámica distintos.
Aunque esos resultados sugieren su existencia, la investigación científica no ha conseguido todavía aislar estos genes que está ligados a la homosexualidad masculina. No obstante, los resultados sobre la línea materna han hecho pensar a ciertos científicos que esos “genes gays” podrían encontrarse en el cromosoma X.
En 2004 un equipo de investigadores dirigidos por Andrea Camperio Ciani de la Universidad de Padua en Italia informó que las mujeres emparentadas con hombres gay tenían más niños que las mujeres emparentadas con hombres heterosexuales. Así por ejemplo, las madres de hombres homosexuales tenían 2,7 niños en promedio mientras que las madres de hombres heterosexuales tenían 2,3. Había resultados similares para otros grados de parentesco.
En un nuevo estudio publicado en PLoS ONE, Camperio Ciani y sus colaboradores usan un modelo matemático para ver los posibles escenarios genéticos que puedan explicar los resultados. Los investigadores estudiaron más de una docena de posibilidades, tales como el número de “genes gay”, cuánta ventaja reproductiva proporcionan, si están localizados en el cromosoma X o no, etc. El modelo que mejor explica los datos disponibles es el que considera que hay dos “genes gay” con al menos uno de ellos en el cromosoma X. Estos genes aumentarían la fertilidad de las mujeres pero la disminuirían en los varones.
Los otros modelos no encajan en los datos, o bien los alelos en cuestión desaparecen fácilmente, o bien invaden la población, o bien no describen los patrones de distribución de homosexualidad masculina y fertilidad femenina observados.
Este fenómeno ha sido encontrado previamente en insectos, aves y en otros mamíferos diferentes al ser humano y se denomina antagonismo sexual. La idea básica es que ciertos factores genéticos se propagan por una población dando ventaja reproductiva a solamente uno de los sexos.
Además los investigadores sugieren que estos genes gay podrían aumentar el atractivo tanto de hombres como de mujeres a ojos de los hombres en lugar de hacer a los hombres simplemente más femeninos como antes se había propuesto. Aunque el efecto es malo para la fertilidad masculina, es bueno para la fertilidad femenina y permite la supervivencia de estos genes dentro de la población a una tasa baja, aunque estable, dentro de una dinámica compleja.
Algunos científicos del área juzgan que este estudio es un elegante análisis matemático y una solución simple a la paradoja darwiniana que representa la homosexualidad.
La paradoja, por tanto, dejaría de serlo y la evolución explicaría plenamente el fenómeno.
El estudio proporciona nuevas pistas sobre la homosexualidad masculina. En particular no habría que verla como un rasgo perjudicial al reducir la reproducción masculina, sino que habría que verla dentro del marco más amplio de la población, en donde aumenta la fertilidad femenina.
La homosexualidad masculina sería además el primer ejemplo en humanos de un número desconocido de rasgos genéticos antagonistas, que contribuirían a mantener la variabilidad genética natural humana.

Además, esto podría abrir nuevas vías a la creación de modelos que explicaran la contribución de estos factores antagonistas sobre otros conflictos sexuales de base genética que no se comprenden bien actualmente.

jueves, 10 de abril de 2014

Wolbachia


El entomólogo Donald Windsor definió la actuación de la bacteria Wolbachia con la siguiente frase: Wolbachia mata a los machos, produce la 'inmaculada concepción' y quizás acelera también la especiación.
Wolbachia fue descrita por primera vez en 1924 por los científicos Hertig y Wolbach. La encontraron presente en diversos tejidos, sobre todo en los reproductivos, del mosquito común Culex pipiens, y por eso a la bacteria se la bautizó como Wolbachia pipientis. Aunque era un endoparásito no parecía producir ninguna enfermedad ni nada interesante, así que el descubrimiento se quedó en un nombre más para el catálogo de especies bacterianas.
Veinticinco años después, en la década de los 50, uno de los campos más candentes en la investigación biológica era la genética. Y para ello se utilizaba a la mosca Drosophila melanogaster. Pero también se intentaba utilizar otros insectos entre ellos a los mosquitos del género Culex. Y ahí empezaron a observarse cosas raras. Había ocasiones en que si se cruzaban dos cepas de la misma especie de insecto no se generaba descendencia fértil. La razón era que había una incompatibilidad citoplasmática entre los espermatozoides de una y los óvulos de la otra. Pero nadie entendía el porqué de dicha incompatibilidad.
La respuesta llegó en el año 1971 de la mano de los investigadores Janice Yen y Ralph Barr. La culpable de dicha incompatibilidad era la bacteria Wolbachia. Si se cruzaban mosquitos macho infectados con hembras infectadas se producía descendencia sin problemas. Si se cruzaban mosquitos macho no infectados con hembras infectadas también se producía descendencia. Pero cuando los mosquitos machos infectados se cruzaban con hembras no infectadas, entonces no se producía descendencia. Janice Yen y Ralph Barr trataron a los machos infectados con antibióticos que eliminaban a las Wolbachias, y luego comprobaron que sí se producía descendencia al cruzarlos con hembras no infectadas.
¿Para qué le sirve a Wolbachia causar la incompatibilidad citoplasmática? Pues para favorecer la reproducción de las hembras infectadas y así conseguir infectar a toda la población de insectos. Wolbachia es capaz de transmitirse verticalmente, desde la madre a las crías. Eso explica por qué los mosquitos machos no infectados se reproducían sin problemas con las hembras infectadas: toda su descendencia estará infectada. Y también explica por qué no hay descendencia entre machos infectados y hembras no infectadas. Wolbachia está presente en el depósito de esperma del insecto, pero no en los espermatozoides maduros y mata a los huevos fecundados si estos no provienen de una hembra infectada.
Cuando se supo que Wolbachia era la responsable de la incompatibilidad citoplasmática en los insectos muchos investigadores se interesaron por ella y así se descubrió que era una pariente de las Rickettsias, otro género de bacterias endoparásitas y que está relacionada evolutivamente con las mitocondrias presentes en las células eucariotas.
Pero la historia de Wolbachia no había hecho más que empezar. La incompatibilidad citoplasmática es un fenómeno bastante extendido, no sólo entre los insectos, sino también en gran parte de los otros grupos de artrópodos. Así que los entomólogos y los microbiólogos aunaron esfuerzos para determinar si dicha bacteria era la responsable de esos casos, y se encontraron con que sí, pero que además era también la responsable de otros fenómenos que alteraban la capacidad reproductiva de las poblaciones infectadas, como por ejemplo:

  • Matar a los machos infectados, con lo que las poblaciones poco a poco van quedando constituidas exclusivamente por hembras infectadas. Esta bacteria elimina el sexo. Llegados a ese punto las hembras pueden reproducirse mediante partenogénesis. Es el caso de las avispas del género Trichogramma.
  • Feminización de los machos. En insectos la determinación sexual viene dada por una determinada producción de hormonas durante el desarrollo. Wolbachia es capaz de alterar esa producción y transforma a los machos en hembras, o en machos estériles.
La infección por Wolbachia puede ser causa de un aislamiento reproductivo entre poblaciones infectadas y no infectadas lo que puede conducir a fenómenos de especiación, es decir, de aparición de nuevas especies. Incluso se ha llegado a describir que Wolbachia puede ofrecer ventajas a su hospedador. En el caso de Drosophila, se ha observado que las moscas infectadas son más resistentes a determinados virus RNA.
Pero lo que más llama la atención es la amplitud de la extensión de las infecciones de Wolbachia entre los artrópodos. Un 16% de los insectos tropicales están infectados y se piensa que el porcentaje a escala mundial es aún mayor. También están infectados otros grupos de artrópodos como las arañas y los isópodos, e incluso se ha descrito en algunos gusanos nematodos.

El Círculo de Liebenberg

Caricatura de El Círculo de Liebenberg
El círculo de Liebenberg es el nombre dado a la camarilla en torno al emperador alemán Guillermo II hasta aproximadamente 1907, denominación empleada principalmente por sus adversarios. Los miembros del círculo, en su mayoría militares, se llamaban a sí mismos la «tabla redonda de Liebenberg».

Relacionado con el escándalo Harden-Eulenburg, en el que la acusación de homosexualidad contra Philipp zu Eulenburg tuvo un papel importante, la mención del Círculo adquirió una connotación negativa para el gran público. En 1906, el periodista Maximilian Harden llegó a la convicción de que la estrategia diplomática de la dirección del Imperio alemán durante la Primera crisis de Marruecos había fracasado porque el Círculo de Liebenberg había convencido al emperador de que evitase la guerra con Francia. Para Harden esto fue motivo para la realización de una campaña contra el Círculo, en el que atacó a los miembros con acusaciones personales de homosexualidad, entre otras cosas. La acusación de homosexualidad conllevó el desprecio de la sociedad y los políticos hacia los acusados, ya que la moral y la legalidad vigente en la época condenaba la homosexualidad como una perversión.

Rosa Winkel

Triángulo rosa (Rosa Winkel)
El triángulo rosa es uno de los símbolos más conocidos por la comunidad gay. El triángulo surgió en la Alemania nazi, y recuerda el exterminio de homosexuales durante el nazismo. También es una editorial.
En los campos de exterminio, donde cada prisionero llevaba un triángulo de distinto color invertido bordado en su ropa para designar la razón de su encierro, los homosexuales llevaban un distintivo rosa. Aunque los homosexuales eran solo una parte de los grupos que la exterminación del régimen nazi perseguía, es el grupo que más a menudo la historia excluye cuando se habla de este período de la historia.
No todos los prisioneros que llevaban un triángulo rosa se veían como homosexuales. A veces estaban casados y solo habían tenido relaciones homosexuales unas pocas veces. A esto hay que añadir que no todos los condenados por el Párrafo 175 acababan en campos de concentración: en la mayoría de los casos eran sólo encarcelados.
Debido a que muchos homosexuales fueron torturados y asesinados por su origen judío, es difícil dar cifras concretas de este grupo. Sin embargo se puede estimar su cantidad entre unas 5.000 y 15.000 personas. El grupo de internos con el triángulo rosa tuvo una tasa de mortandad del 60%, una cifra por encima de la media para prisioneros “no judíos”. La razón podría estar en que a menudo estaban aislados, a veces evitados y mantenidos a distancia por los demás reclusos por estar marcados como “diferentes”. Esto a pesar de que las relaciones homosexuales eran mayoritarias en los campos que estaban estrictamente separados por sexos.
Los prisioneros con el triángulo rosa no fueron resarcidos por el gobierno alemán hasta el 2002 cuando la mayoría ya había fallecido. Si no dejaban de tener relaciones sexuales con otros hombres podían ser encerrados de nuevo según el mismo artículo 175 usado por los nazis. Es el caso de Heinz Dörmer que fue prisionero 20 años en total, tanto en campos de concentración del Tercer Reich como en prisiones de la República Federal Alemana. El artículo 175 del código penal alemán que consideraba las relaciones homosexuales un delito, se mantuvo sin modificar tras la guerra 24 años más.

En los años 1970 resurgió el triángulo rosa como símbolo del activismo gay. En los últimos años ha sido sustituido por la bandera del arco iris, que ha resultado más popular.

Elisar von Kupffer

Elisar von Kupffer
Elisar von Kupffer nació el 19 de febrero de 1872 en Tallin, Estonia y falleció en Minusio, Suiza el 31 de octubre de 1942. Fue un artista, antólogo, poeta, historiador, traductor y dramaturgo. Utilizó el seudónimo Elisarion en la mayoría de sus escritos.
Estudió en San Petersburgo y luego en Berlín. Después de viajar por Italia de 1902 a 1915 se estableció como pintor artístico y muralista en Locarno, Suiza, con su compañero Eduard von Mayer (1873-1960), quien era historiador y filósofo. De 1925 a 1929 transformaron su villa de Minusio (en el lago Maggiore) en una opulenta colección de arte, el Santuario Artis Elisarion. Desde 1981 éste ha sido un museo dedicado al trabajo de von Kupffer. La pareja fue la fundadora de un pequeño movimiento artístico llamado Klarismus (en castellano: "claridad").
También fue un fotógrafo, realizando estudios fotográficos de mozos para ser utilizados en la creación de sus pinturas, pero más a menudo su propia figura rejuvenecida puede ser vista como el objeto de sus obras de arte.
En 1899-1900 Adolf Brand publicó la antología de literatura homoerótica de von Kupffer Lieblingminne und Freundesliebe in der Weltliteratur en Berlín. Además fue creada como una protesta contra el encarcelamiento de Oscar Wilde en Inglaterra.

Sascha Schneider

Sascha Schneider
Rudolph Karl Alexander Schneider, más conocido como Sascha Schneider (San Petersburgo, 21 de septiembre de 1870-Swinemünde, 18 de agosto de 1927) fue un pintor y escultor alemán destacado por sus obras sobre desnudo masculino y homoerotismo.
Aunque nacido en Rusia, pasó su infancia con su familia en Zúrich y, tras la muerte de su padre, en Dresde, donde ingresó como estudiante en 1889 en la Academia de Bellas Artes de Dresde. En 1903 conoce al exitoso escritor Karl May, para quien realizará numerosas portadas de sus libros, entre otras las de Winnetou, Old Surehand, Am Rio de la Plata. En 1904 Schneider fue contratado como profesor de la Großherzoglich-Sächsische Kunstschule de Weimar. Fue un colaborador destacado de la revista Der Eigene, fundada por Adolf Brand y dirigida a homosexuales.
Durante este periodo, Schneider vivía con el pintor Hellmuth Jahn. Jahn chantajeó a Schneider con hacer pública su homosexualidad, castigada por el artículo 175 del Código Penal alemán, por lo que Schneider decidió abandonar el país para refugiarse en Italia, donde la homosexualidad no estaba entonces perseguida. Allí conoció al pintor Robert Spies, con quien marchó de viaje por el Cáucaso. Tras regresar a Alemania y vivir allí seis meses en Leipzig, volvió a Italia y se instaló en Florencia. Al estallar la Primera Guerra Mundial decidió marchar a Alemania y fijó su residencia en Hellerau, cerca de Leipzig. Fue uno de los cofundadores del instituto Kraft-Kunst para modelos.

Schneider estaba enfermo de diabetes. Durante un viaje en barco por la costa de Swinemünde, sintió sed y, por error, bebió un líquido quitamanchas. Como consecuencia, sufrió un colapso y murió en Swinemünde en 1927. Su cuerpo yace en el cementerio de Loschwitz, Alemania.

Narciso

Eco y Narciso,
pintura de John William Waterhouse (1903)
En la mitología griega, Narciso era un joven muy hermoso. Las doncellas se enamoraban de Narciso, pero él las rechazaba. Entre las jóvenes heridas por su amor estaba la ninfa Eco, quien había disgustado a Hera y por ello ésta la había condenado a repetir las últimas palabras de aquello que se le dijera. Por tanto, era incapaz de hablarle a Narciso de su amor, pero un día, cuando él estaba caminando por el bosque, acabó apartándose de sus compañeros. Cuando él preguntó «¿Hay alguien aquí?», Eco respondió: «Aquí, aquí». Incapaz de verla oculta entre los árboles, Narciso le gritó: «¡Ven!». Después de responder: «Ven», Eco salió de entre los árboles con los brazos abiertos. Narciso cruelmente se negó a aceptar su amor, por lo que la ninfa, desolada, se ocultó en una cueva y allí se consumió hasta que sólo quedó su voz.
Para castigar a Narciso por su engreimiento, Némesis, la diosa de la venganza, hizo que se enamorara de su propia imagen reflejada en una fuente. En una contemplación absorta, incapaz de apartarse de su imagen, acabó arrojándose a las aguas. En el sitio donde su cuerpo había caído, creció una hermosa flor, que hizo honor al nombre y la memoria de Narciso.

Versión helénica
Se trata de una historia moral en la que el orgulloso e insensible Narciso es castigado por los dioses por haber rechazado a sus pretendientes. Se cree que es una historia moralizante dirigida a los adolescentes griegos de la época. Hasta hace poco la única fuente de esta versión era un fragmento de la Descripción de Grecia de Pausanias, 150 años posterior a la de Ovidio. Una versión muy similar fue descubierta en el llamado Papiro de Oxirrinco en el año 2004, una versión muy anterior a la de Ovidio en al menos unos cincuenta años.

En la historia helénica, el joven Ameinias ama a Narciso pero es rechazado cruelmente por él. Como una forma de burlarse de Ameinias, Narciso le entrega una espada, que Ameinias utiliza para suicidarse ante las puertas de la casa de Narciso, mientras reza a la diosa Némesis pidiéndole que Narciso un día conozca el dolor del amor no correspondido. Esta maldición se cumple cuando Narciso se enamora de su propia imagen reflejada en un estanque e intenta seducir al hermoso joven sin darse cuenta de que se trata de él mismo hasta que intenta besarlo. Entristecido de dolor, Narciso se suicida con su espada y su cuerpo se convierte en una flor, la cual se le llamó Narciso.

Versión romana
En la versión romana, la ninfa Eco se enamora de un vanidoso joven llamado Narciso, hijo de la ninfa Liríope de Tespia. Preocupada por el bienestar de su hijo, Liríope decidió consultar al vidente Tiresias sobre el futuro de su hijo. Tiresias le dijo a la ninfa que Narciso viviría hasta una edad avanzada mientras nunca se conociera a sí mismo.
Un día, mientras Narciso estaba cazando ciervos, la ninfa Eco siguió sigilosamente al hermoso joven a través de los bosques, ansiando dirigirse a él pero siendo incapaz de hablar primero, ya que la diosa Hera la había maldecido a solo poder repetir lo que otros decían. Cuando finalmente Narciso escucha sus pasos detrás de él, pregunta: "¿Quién está ahí?", a lo que Eco responde: "¿Quién está ahí?". Y continuaron hablando así, pues Eco únicamente podía repetir lo que otros decían, hasta que la ninfa se mostró e intentó abrazar a su amado. Sin embargo, Narciso la rechazó y le dijo vanidosamente que le dejara en paz, y se marchó repudiándola. Eco quedó desconsolada y pasó el resto de su vida en soledad, consumiéndose por el amor que nunca conocería, hasta que solamente permaneció su voz.
Por lo que se refiere a Narciso, un día sintió sed y se acercó a beber a un arroyo. Al verlo, se fascinó por la belleza de su propio reflejo, sin atreverse a beber por miedo a dañarlo e incapaz de dejar de mirarlo. Finalmente murió contemplando su reflejo y la flor que lleva su nombre creció en el lugar de su muerte.

En algunas versiones, sin duda influidas por la versión helénica, se dice que otra muchacha que también había sido rechazada por Narciso rezó a la diosa Némesis para que lo castigara por su vanidad. En otras versiones se dice que Narciso es atormentado en el Inframundo contemplando un reflejo que no corresponde a su amor.